Es tomar las riendas de la información que consumimos.
Tener la capacidad de discernir de donde vienen las noticias y con qué objetivo
son difundidas. La realidad que presentan los medios de comunicación es
uniforme: el mismo orden de prioridades, siempre los mismos temas,
políticamente correctos y extraídos de agendas internacionales. En realidad,
son pocas las personas que deciden qué es noticia y que no, y a partir de esta
selección se organiza la grilla informativa del día. Por tanto, la visión de la
realidad actual que nos dan los grandes medios de comunicación, es muy
fragmentada. Cada persona, estudiante, profesional, gobernante,
mínimamente interesado con los procesos sociales, debe ser consciente de esta
limitación y asumir la responsabilidad de buscar otras fuentes, más
diversas, menos monopólicas, y contribuir desde ahí al cambio social.
Básicamente, dejar de ser repetidores y comenzar a formar nuestro propio
pensamiento.
Para los actores que antes mencionábamos, estudiantes, profesionales, políticos,
la autoeducación hoy se puede obtener básicamente con la sola voluntad de
querer hacerlo. Hoy, en la World Wide Web, se estimula el compartir mediante
prácticas no-lucrativas. Allí se plasma el ideal de una sociedad
abierta: se promueve la libertad individual, no hay lugar para el autoritarismo
y el conocimiento pertenece a todos
No hay comentarios:
Publicar un comentario